Los callos a la madrileña es un platos típicos de la gastronomía Madrileña, y nosotros tenemos las mejores recetas explicadas paso a paso de este plato que es muy fácil de preparar.
Receta de callos a la madrileña tradicional
Sigue las indicaciones de nuestra receta casera paso a paso y podrás preparar los auténticos callos a la madrileña.
Ingredientes
- 1.5 kg. de callos de vaca
- 500 gr. de morro de vaca
- 100 gr. de tocino
- 4 manitas
- 1 morcilla
- 1 chorizo
- 1 diente de ajo
- 2 cebollas
- 1 cucharada de harina
- 1 cucharada de pimentón
- 200 ml. de aceite de oliva
- ½ guindilla
- 2 clavos de olor
- 1 cucharada de pimentón
- Perejil
- Sal
- Pimienta blanca molida
¿Cómo preparar callos a la madrileña?
- Lo primero será limpiar los callos, así que ponlos en un cuenco con agua por unas dos horas. Cuando estén listos, los escurres bien y echas en una cacerola grande, o un perol, junto con el morro de vaca troceado y las manitas.
- Llena con agua y espera hasta que empiece hervir. Entonces vacía la olla, dejando dentro toda la carne, y vuelve a llenar con agua limpia.
- Agrega ahora el tocino, el chorizo y la morcilla. Remueve bien y pon la potencia del fuego a la mitad.
- Pela una cebolla, córtala en rodajas y añádele los clavos de olor.
- Mete dentro de la cacerola con todo. Tras unos minutos hirviendo se agrega el diente de ajo pelado, y la cantidad de laurel, perejil, sal y pimienta blanca a tu gusto, para que el sabor sea como a ti te guste.
- Tapa y deja hacerse a fuego lento por dos horas y media. Transcurrido este tiempo, retira los huesos de las manitas, el laurel y la cabeza de ajo.
- Pon una sartén a calentar aceite. Pela y pica bien la otra cebolla que aún te queda para freírla en la sartén con el ajo que has sacado y un poco de perejil.
- Cuando la cebolla esté dorada, agrega la guindilla junto con la cucharada de pimentón. Remueve bien.
- Echa una cucharada de harina y vuelve a remover. Con esto tendremos un sofrito que agregarás al puchero que has hecho y remueve bien, agregando un poco más de sal si fuera necesario.
- Deja que se haga a fuego lento por 20 minutos. A la hora de servir, solo tienes que trocear el chorizo y la morcilla para repartirlo entre los comensales y listo para comer, buen provecho.