Una tarta de café, chocolate y queso fácil sin horno. Si te gusta el café y no eres muy fan de los postres excesivamente dulces, esta tarta es para ti.
Para darle más cuerpo, se ha utilizado queso. Para darle dulzor y el sabor característico del café con leche, se ha empleado leche condensada. Para cocerla, no hemos utilizado nada, porque no se ha cocido… Por arriba la hemos cubierto con un poco de chocolate con leche fundido. El resultado: una tarta de café buenísima.
Hay que helarla, porque la receta prescinde de gelatina. En su lugar lleva un sobre de flan de 5 raciones de sabor tradicional (no de vainilla).
Con las cantidades que pongo yo pude realizar dos tartas: una de unos 15 cm. y otra de unos 18 cm. de diámetro.
También es muy importante que tengás en cuenta que el molde no lo retiraremos hasta que la tarta esté congelada, o cuando la vayamos a servir. Siempre utilizo moldes desmontables, por su comodidad.
Ingredientes :
Para la base:
- 200 gr. de galletas María.
- 105 gr. de mantequilla sin sal.
- 30 gr. de cacao en polvo.
Para el relleno:
- 280 gr. de queso Quark.
- 150 gr. de café (líquido, ya hecho).
- 200 gr. de leche condensada.
- 500 gr. de nata.
- 60 gr. de azúcar.
- 1 sobre de flan de cinco raciones (yo utilicé sabor tradicional, no vainilla).
Para la cobertura:
- 80 gr. de café (ya hecho).
- 125 gr. de chocolate con leche .
- 25 gr. de leche condensada.
- 1 sobre de gelatina.
Preparación de la tarta de café helada:
Es muy sencilla. En primer lugar, comenzamos con la base de la tarta. Para la base, es recomendable que la mantequilla se encuentre a temperatura ambiente. Si quieres, puedes derretirla en el microondas o en un cazo. La cuestión es que pueda mezclarse bien.
Trituramos las galletas y las mezclamos con la mantequilla y el cacao.
Lo mezclamos todo hasta que obtengamos una mezcla homogénea.
Preparamos el molde (o los moldes, en mi caso). Forramos la base con papel de hornear. Embadurnamos con mantequilla y repartimos la mezcla anterior sobre el fondo, homogéneamente, de manera lisa, como si estuviéramos haciendo una carretera sin baches… Sólo el fondo; no es necesario que levantemos bordes a la base de la tarta.
Metemos en el frigorífico para que coja cuerpo y endurezca un poco.
Seguimos preparando el relleno de la tarta. Para ello, montamos la nata con el azúcar. Ya sabes cómo se monta la nata: comenzamos a batir. Cuando la nata coja cuerpo, añadimos el azúcar poco a poco y seguimos batiendo hasta que obtenga más dureza. El truco: darle la vuelta al bowl donde estamos montando la nata. Si no se cae al suelo, lo habremos hecho bien. Si se cae al suelo, debes limpiar la cocina y volverlo a intentar de nuevo…
Edito: Diluimos la leche condensada en el café.
En un bowl mezclamos el café y la leche condensada, el queso y el sobre de flan. Lo batimos hasta que todo esté correctamente integrado.
A continuación, mezclamos la nata con el batido de queso y café:
sacamos la tarta que habíamos metido en la nevera? La sacamos de la nevera y vertemos nuestra mezcla anterior encima, sin miramientos. Sin darle mucho tiempo a reaccionar, cogemos todo el conjunto y lo volvemos a meter de nuevo en la nevera, para que vaya cogiendo cuerpo.
Mientras tanto, seguimos preparando la cobertura.
Derretimos el chocolate al baño María.
Mezclamos el café (que habríamos preparado con antelación) junto con el sobre de gelatina neutra (10 gr.). Ponemos a calentar todo el conjunto, sin que llegue a hervir, y vamos removiendo bien, hasta que la gelatina quede completamente disuelta. Quitamos del fuego.
Mezclamos el café y la gelatina con el chocolate derretido y la leche condensada. Removemos bien hasta que todo esté correctamente integrado.
Sacamos la base y el relleno que teníamos dentro de la nevera, Vertemos encima la cobertura que acabamos de preparar. Metemos todo el conjunto en el congelador. Al cabo de poco tiempo estará lista para comer.
Puedes decorar con unos conguitos de varios colores, como hice yo.
Qué aproveche!!!!
buenos días me podrias decir que es queso quark y nata ya que soy de Venezuela y no lo conozco