Natillas Caseras Sin Huevo: Dulzura y Textura Irresistibles

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Natillas caseras sin huevo

Explora la dulzura clásica y reconfortante de nuestras Natillas Caseras Sin Huevo. Con una base suave de leche y nata líquida, esta receta se eleva con toques de azúcar vainillado y el aroma cítrico del limón.

La cocción lenta y precisa te brindará natillas de textura delicada, mientras que la galleta María coronando cada porción agrega un toque crujiente.

Aromas a canela y recuerdos de la infancia se entrelazan en cada cucharada de este postre que se enfría en la nevera para una experiencia irresistible.

Explora la dulzura clásica y reconfortante de nuestras Natillas Caseras Sin Huevo. Con una base suave de leche y nata líquida, esta receta se eleva con toques de azúcar vainillado y el aroma cítrico del limón.

Ingredientes:

  • 1/2 l. de leche 100 gr. de azúcar
  • 250 ml. de nata líquida
  • 30 gr. de maicena
  • 1 limón
  • 1 cuchara pequeña de azúcar vainillado
  • 1 paquete de galletas María
  • 1 ramita de canela
  • Canela en polvo

¿Cómo preparar natillas caseras sin huevo?

  • Lo primero que vamos a hacer es disolver la maicena en la leche. Para ello, coge la leche y ponla en un vaso, solo tienes que llenar la mitad del vaso. A continuación, añade la maicena y mézclalo todo.
  • Coge ahora el resto de la leche y ponlo en una olla con el fuego a potencia media.
  • Pela el limón y echa la corteza en la olla. Añade también la ramita de canela.
  • Cuando veas que la leche empieza a hervir, apaga el fuego y cuélala, así consigues que no haya ninguna ramita de canela suelta.
  • Vuelve a poner la leche al fuego a potencia media y añade el azúcar normal, el azúcar vainillado y la nata líquida y remueve con seguridad. Tienes que hacer que todos los ingredientes se mezclen bien.
  • Déjalo al fuego a potencia media-baja durante unos cinco minutos. Ahora, añade el vaso de leche con maicena y vuelve a remover.
  • Poco a poco verás como la mezcla que has preparado va espesándose. Cuando veas que está lo suficientemente sólida, apaga el fuego. Coge los recipientes para natillas y llénalos con la masa que has preparado, ponles encima la galleta María y un poco de canela en polvo y mete tus natillas en la nevera.
  • Cuando estén frías, podrás servirlas. ¡Esperamos que te gusten!

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