Los pulmones son un órgano muy importante en el cuerpo, ya que de ellos depende nuestra respiración.
- Fumar y enfermedades como el asma o la bronquitis crónica que pueden impedir que funcionen a en su óptimo rendimiento.
- También la falta de ejercicio y la mala alimentación pueden hacer que los pulmones se debiliten y nuestro organismo no esté lo suficientemente oxigenado, produciéndose sensación de cansancio y falta de energía y vitalidad.
- Hay ejercicios de respiración que fortalecen los pulmones y los capacitan para captar más oxígeno y expulsar más toxinas. De la misma manera, el ejercicio cardiovascular ayuda a la función pulmonar y mejora la fuerza y salud en general.
La alimentación también nos puede ayudar a depurar nuestros pulmones y mantenerlos en buen estado.
Los ácidos grasos Omega-3, presente en los aceites de pescado y en semillas como el lino, junto con la vitamina C y el Zinc pueden mejorar el asma crónicos cuando se consumen diariamente en cantidades adecuadas.
El ajo es uno de los vegetales con mayores beneficios para el aparato respiratorio, por su capacidad de despejar los bronquios y por sus propiedades antibacterianas. Los suplementos de ajo sin olor conservan estas propiedades beneficiosas.
Las peras y las manzanas contienen quercetina, un potente flavonoide con efectos protectores de los pulmones y beneficios para el alivio y prevención de la sintomatología del asma.
También se encuentra, aunque en menor cantidad, en el chocolate negro, el té y la cebolla.
Los antioxidantes presentes en las zanahorias protegen los pulmones frente a las infecciones y reducen el riesgo de contraer cáncer de pulmón, excepto en fumadores.
Los berros son ricos en vitamina C y vitamina B6, que protegen a los pulmones de los daños del tabaco y retrasan su envejecimiento prematuro.
El arroz integral es rico en selenio, potente antioxidante que puede ayudar a evitar la formación de radicales libres que dañan los pulmones y a reducir la probabilidad de sufrir asma.
Alimentos ricos en selenio, son también el pollo y el huevo.
Aumentar el consumo de ajo, cebolla, puerro, apio y rábanos ayuda a desinfectar las vías respiratorias y a dilatar los bronquios, previniendo el asma y la alergia.
Si se padece de asma o de otras enfermedades respiratorias, o se tiene tendencia a ellas, es recomendable evitar el consumo de bebidas gaseosas, que suelen contener aditivos como benzoato de sodio, el glutamato monosódico y los sulfitos, los cuales pueden provocar la aparición o agravar los síntomas de la enfermedad respiratoria.
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